Hoy dando un paseo, cámara en mano, a punto de llegar al puente de San Rafael, he encontrado un libro abandonado sobre un banco; pensé que sería algo de ese proyecto de libros abandonados o Book crossing, que siempre me ha parecido una buena idea, pero con exceso de burocracia. Tras hacerle un par de fotos me he sentado a su lado y he comprobado que no tenía ninguna indicación de esa plataforma.
Era un obra de Honoré de Balzac, en concreto Papá Goriot, tenía la tapa despegada del libro, pero por lo demás todo bien. La primera intención fue llevármelo, como si de un pequeño tesoro se tratara; pero yo ya disfruté hace años de esa obra, así que tras hacerle alguna foto más, lo he dejado en su sitio, espero que haya tenido suerte y la siguiente persona que se percatara de su presencia, lo utilice como se merece, disfrutando de su lectura.
Ya de vuelta del paseo, sobre los bancos situados delante de la Biblioteca Central y apoyados en las puertas de la propia biblioteca, había más libros abandonados, pero estos con otra intención, un partido político había metido su propaganda entre las hojas de los libros, idea interesante sin duda, aunque la mayoría de los libros eran viejos libros de texto, novelas rosa y algún libro de astrología, en fin, nada que ver con el solitario y abandonado Papá Goriot.
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